Si se quiere abordar la fenomenología, hay que ser consciente del hecho de que se resume a una doble interrogación: ¿de qué naturaleza es la conciencia humana? ¿Qué conocemos del mundo?
Empecemos por la primera.
Hace milenios que, desde el «conócete a ti mismo» hasta el «pienso luego existo», no se deja de glosar esta irrisoria prerrogativa del hombre que constituye la conciencia que éste tiene de su propia existencia y, sobre todo, la capacidad que tiene esta conciencia de tomarse a sí misma como objeto.
Cuando algo le pica, el hombre se rasca y tiene conciencia de estar rascándose. Si se le pregunta: ¿qué haces? Responde: me rasco. Si se lleva más lejos la investigación (¿eres consciente del hecho de que eres consciente de que te rascas?), responde otra vez que sí, y así con todos los «eres consciente» que se puedan añadir. ¿Alivia en algo su sensación de picor el saber que se rasca y que es consciente de ello? ¿Influye acaso de manera beneficiosa la conciencia reflexiva en la intensidad del picor? Quia. Saber que a uno le pica y ser consciente del hecho de que se es consciente de saberlo no cambia estrictamente nada el hecho de que a uno le pique. Y desventaja añadida, hay que soportar la lucidez que resulta de esta triste condición, y apuesto diez libras de ciruelas Claudias a que ello acrecienta una molestia que, en el caso de mi gato, un simple movimiento de la pata anterior basta para aliviar. Pero resulta para los hombres tan extraordinario, porque ningún otro animal lo puede y porque así escapamos a la bestialidad, que un ser pueda saberse sabiendo que se está rascando, que esta prelación de la conciencia humana parece para muchos la manifestación de algo divino, algo que en nosotros escapa al frío determinismo al que están sometidas todas las cosas físicas.
SABIDURÍA PURA Y DURA DE LA ELEGANCIA DEL ERIZO - 5. TRISTE CONDICIÓN.
Estoy feliz de haber descubierto este libro, gracias a Mercedes por su recomendación!!!.
La lectura de este libro ha sido reveladora, enternecedora, alegre y muchas otras cosas más.
hola chilliber
estoy un poco confundida, todo esto viene en las páginas de la elegancia del erizo?,
Si Delia, es un fragmento del libro.
Un beso!